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    Una niña feliz

    Una adolescente abusada

    Una mujer buscando despertar

    Hemos oído muchas veces que el dolor que traemos con nosotros viaja de generación en generación, que no es nuestro, que, en realidad, es de nuestra familia. Es el dolor y el sufrimiento de nuestras madres, de nuestras abuelas y de todo nuestro clan, que se nos transmite en el vientre materno. Pero, un día, llega alguien listo para sentirlo todo.

    Venimos de personas que decidieron actuar como si “eso” no hubiera sucedido. Decidieron ocultar el dolor del abuso, de la pobreza, de las faltas de amor, de las faltas de respeto, lo que llamamos hoy evitación.

    En mi clan, un 18 de marzo de 1990, un día domingo, a la noche, una pequeña nació y su destino fue sentirlo todo. Yo nací con el regalo de sentir y entendí que no iba a poder sanar lo que no me permitía admitir. Durante muchos años, yo también viví como si “eso no hubiese sucedido”.

    Mi sol mi luna mi estrella - Yani Dettler

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    Hemos oído muchas veces que el dolor que traemos con nosotros viaja de generación en generación, que no es nuestro, que, en realidad, es de nuestra familia. Es el dolor y el sufrimiento de nuestras madres, de nuestras abuelas y de todo nuestro clan, que se nos transmite en el vientre materno. Pero, un día, llega alguien listo para sentirlo todo.

    Venimos de personas que decidieron actuar como si “eso” no hubiera sucedido. Decidieron ocultar el dolor del abuso, de la pobreza, de las faltas de amor, de las faltas de respeto, lo que llamamos hoy evitación.

    En mi clan, un 18 de marzo de 1990, un día domingo, a la noche, una pequeña nació y su destino fue sentirlo todo. Yo nací con el regalo de sentir y entendí que no iba a poder sanar lo que no me permitía admitir. Durante muchos años, yo también viví como si “eso no hubiese sucedido”.

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